Main menu

Domingo 7 despertador. 6:30. Térmica, polar, pantalones camo (Ejército Colonial Portugués), polainas, chaleco polartec, gorrito polartec hidrofugado, botas goretex, zapatillas goretex de repuesto, calcetines de repuesto, Arco, flechas, carcaj, cuchillo, dactilera, brazalera, montador, sacaflechas, gafas, documentación, algo de pasta, el paraguas… que no se me olvide… ah! y la licencia… -¡Mikel la licencia! que Manolo la pide siempre- Bueno, ya estamos, marchando.

Viaje infernal con chubascos constantes, pero seguro que después de Etxegarate mejora. Vana ilusión, llegados a la Llanada más negro que los c….. de un grillo; y no digamos nada cuando nos acercábamos a Legutiano. Tuvimos un primer chubasco de bienvenida cuando montábamos el arco, pero escampó cuando llegamos al tipi a pasar revisión. Saludos a los “kiwis” y a los demás, especialmente a mis antiguos colegas de longbow, que envidia. ¿Terminaré la Liga con el ARI? o… ¿volveré al palo de escoba? Patrulla de lujo como siempre, buena gente ésta del 3D y con buen humor. Recorrido precioso, largo y aparentemente fácil. Eso sí, las posturas de tiro determinaban el éxito y yo la verdad no tuve mucho. A mitad de recorrido empezó la lluvia que, aunque no muy intensa mojaba y hacía salir las setas practicamente a nuestro paso. Justi hizo una buena colecta entre bicho y bicho.

Terminamos los últimos, no puede ser, ¡detrás de los libres! Claro, nos había tocado justo terminar en la mitad de la vuelta y tuvimos que andar un ratito con un bicho a cuestas. Decía mi amigo Andrés que eso siempre les tocaba a los longbows. Ahora veo que no es verdad, por lo menos a veces. Bocata chapoteando en el barro y comentarios de los resultados. De los diarcos Mikel mal, Mauri psé y Paco contento. Yo ya sabéis.

Despedida de los “kiwis” (que pobres, les toca desmotar todo con lo que está cayendo) y vuelta. En el coche Mikel sornando y yo muy cansado, medio hipnotizado por el limpiaparabrisas, consigo llegar sin novedad. A la tarde sentía las piernas cansadas y estaba hecho polvo. Mikel igual. Y luego dicen que esto no es un deporte serio y exigente.